05 julio 2012

Importante e insignificante pretemporada

En un mes desde hoy comenzará la pretemporada de la NFL. Sera el día del partido del Hall of Fame, que enfrentara a Cardinals y Saints. Si, Saints. Con la que está cayendo. Así que el blog vuelve de estas vacaciones que se/me ha/he tomado, con esta cuenta atrás de un mes para el inicio del inicio de la temporada. Hay un pre-inicio, los training camps, y aprovechare las noticias que generen para ir desgranando las divisiones en una previa de la temporada.

Pero hoy vuelvo del parón para contaros algunas historias de la historia de las pretemporadas. Estos partidos que no cuentan para nada más que para entrar en forma y dirimir que descartes se harán para el roster que iniciara la temporada. Eso si, como te lesiones a ver quien es el guapo te dice que el partido no vale. O como batas un record en alguna jugada. En este caso porque tú recompensa será no entrar en los libros de records y pasar a ser recordado precisamente por no estar en esos libros. Le paso a 2002 al kicker sueco Ola Kimrin, quien con un FG de 65 yardas batió por 2 el record histórico. Pero no cuenta.

Antes de la llamada época moderna del football, esa que empieza en los 60s, estaba prohibido jugar con equipos de tu propia liga a modo de entrenamiento. Para ver football fuera de la competición había que acudir a los partidos de exhibición de post-temporada. Existió el partido entre el campeón y el equipo de All-Stars, el que disputaban las estrellas del college football contra un equipo de la NFL, y la Pro Bowl que se extiende hasta hoy. También quiero destacar una serie de partidos de exhibición en los 50s, un experimento entre NFL y CFL con reglas mixtas. Se abandono el proyecto cuando llego la primera victoria canadiense. Mejor cortar por lo sano.

Las entradas no son especialmente baratas 




Los partidos de pretemporada tienen en esa década de cambio para el deporte, cuando algunas franquicias de NFL y AFL abrieron al público, y a su dinero, algunos de sus entrenamientos donde su ataque se enfrentaba a su defensa. Al ver negocio, las ligas abrieron la puerta a los enfrentamientos entre sus equipos fuera de la temporada. Aprovechando a los rivales que te quedasen más cerca de la ciudad, para evitar desplazamientos tontos y recaudar más. Y así, el inicio de la fusión de AFL y NFL y de la Superbowl radica en los primeros partidos de pretemporada entre equipos de las dos ligas.

Volviendo al tema de que cualquier estadística de pretemporada es inútil, el ejemplo que se pone de esto es reciente. Los Lions de la temporada del 0-16, tuvieron una pretemporada de 4-0. Y ya está. Los partidos son laboratorios de pruebas, y se prima el no cansarse que la temporada es dura. Hay una norma no escrita para evitar empates y prorrogas. Eso sí, si un equipo quiere probar la habilidad de su kicker bajo presión está en su derecho de probar a forzar una prorroga. Pero cuanto menso se juegue mejor, para evitar sobretodo lesiones.

Porque hay historial trágico. Díganselo a Michael Vick, que se partió una pierna en pretemporada de 2003, perdiéndose 11 partidos. Díganselo al entonces CB de los Giants, Jason Sehorn, que en 1998 se destrozo la rodilla poniendo prácticamente fin a su carrera.  Y a muchos más damnificados. Así que en un mes empezaremos a vivir con moderación la vuelta del football. No nos vayamos a lesionar también nosotros, que nos quedaran 5 meses de football.

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