Bronislau Nagurski,
o Bronko Nagurski que es como pasaría
a la eternidad, era un tipo grande. Un tipo dominante, tan dominante, que los
periodistas deportivos consideraban que podía jugar en todas las posiciones
del juego, que un equipo de 11 como Nagurski ganaría por rendición del
contrario. Un tanque.
Nagurski nació en
1908 en Rainy River, Canada. El
pequeño pueblo está situado en la frontera entre Ontario y Minnesota,
totalmente en mitad de nada. Pero por aquel entonces la nada era más algo que ahora,
y allí se asentó una familia de inmigrantes ucranianos. Luego se mudarían al
sur de la frontera, a International
Falls. El chico, de estructura grande, se paso la infancia ayudando en un
aserradero, y así cogió esa percha que tenia. Alguien debió comentar a Fats Spears, entrenador de la University
of Minnesota, algo sobre el chico porque se cogió el coche hasta su pueblo
y nada más verle decidió llevárselo.
Para ver si el chaval valía, Spears decidió probarle en un 1-contra-2.
Contra 2 linemen titulares del equipo. Se los merendó, no una sino tres
veces. Señal de lo venidero. Fue el corredor estrella y el defensa estrella en los
3 años que pasó en la universidad, de
1927 a 1929. En 1930 pasaría a
profesional, pero el primer Draft no sería
hasta 1936, luego aquí la situación
fue que el equipo más espabilado se iba a llevar a Nagurski. Y esos fueron los Bears.
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Para los cánones actuales de RBs hubiese sido un gigante |
En Chicago
jugaría también como FB y DT, y eventualmente como OL si no estaba al 100% como para correr. En esas 3
posiciones fue alguna vez nombrado All-Pro.
Esos Bears tenían a Red Grange, el mejor corredor de la
época, pero Nagurski era el hombre
orquesta. Serian campeones de la NFL
en 1932 y 1933.
La NFL ya conocía
a varias superestrellas. Jim Thorpe,
Ernie Nevers o el mismo Red Grange. Pero Nagurski volvía locas a las masas de otra manera. Generaba hasta
leyendas urbanas. Como la de que en un partido contra los Redskins jugando de FB
atropello a cuatro defensas con la cabeza agachada, cruzo la línea de goal, se empotró contra uno de los
postes y rebotó contra el muro de ladrillo del Wrigley Field de Chicago
haciéndole una grieta. Cuando regreso al banquillo dijo “¡Ese último tío me ha dado fuerte!”. Es tan buena la historia que
quieres que sea verdad, y haces que sea verdad.
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Las formaciones que planteaba George Halas sacaban el maximo de Nagurski |
Durante su época de jugador le dio también por probar el wrestling. Al retirarse en 1937 paso a dedicarse a tiempo completo,
proclamándose 2 veces campeón
mundial. Era popular. Durante la Segunda
Guerra Mundial volvió a los Bears
para ayudar a rellenar una plantilla diezmada por la llamada a filas. En 1943 ganaría su tercer título de la NFL. Luego se retiraría definitivamente
y viviría del wrestling hasta 1960. Murió en 1981 en su casa de International
Falls.
Si viviese en la actualidad Bronko Nagurski sería una superestrella del máximo nivel. Un éxito
comercial. Alguien increíblemente popular. Un tipo grande.